La percepción de un objeto por nuestro sistema visual siempre está condicionada por su entorno. Nuestros ojos perciben estos triángulos "distintos". Los de arriba son exactamente iguales a los de abajo. Sin embargo a los de arriba los percibimos como "mas luminosos". En efecto, el fondo (claro u oscuro) dan una apariencia distinta a los objetos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario